Tras una pretemporada plagada de buenos resultados llegaba uno de los partidos más importantes de la temporada para el Barcelona, no tanto por la entidad del rival como por lo decisivo del encuentro. Los hombres de Pep Guardiola afrontaban el encuentro relajados pero conscientes de las consecuencias en caso de caer eliminados ante el Wisla. El conjunto polaco tenía como único objetivo lograr un resultado que le permitiese soñar para el partido de vuelta.
El partido comenzó según el guión previsto, con el Barcelona asediando a un rival atrincherado en defensa y centrado frenar la salida en tromba de los de Guardiola. El Wisla evidenció muy pronto sus inferioridad y no dudó en cortar una vez tras otra el juego blaugrana por medio de faltas. El gol culé parecía cuestión de tiempo, justo el que tardase en cometer un error la defensa polaca, colocada cual muro de hormigón delante de su portería.
Eso ocurrió cuando se llegaba al primer cuarto de hora de partido, pero los dos intentos de Henry se encontraron con Pawelek. Mejor suerte tuvo el indultado Eto'o unos minutos después. El delantero camerunés recibió un perfecto pase en profundidad de Márquez que no desaprovechó cruzando la pelota al palo izquierdo de la portería rival. Tras el gol, Henry estuvo muy cerca de hacer una de las suyas, pero el esférico se fue por centímetros. El Barcelona era un aunténtico vendaval frente a un Wisla que se defendía como gato panza arriba. La goleada estaba servida.
Fue Xavi el que se encargó, con su primera aparición en ataque, de poner en el marcador una diferencia que se antojaba insalvable para el Wisla. Un potentísimo derechazo del centrocampista catalán, ante el que Pawelek no pudo hacer nada, significó el segundo del Barça y la tranquilidad en las gradas del Camp Nou.
El último tramo de la primera mitad siguió siendo un monólogo del Barcelona sobre el césped del Camp Nou ante un equipo al que el partido le venía demasiado grande, pero al que no se le podía exigir más entrega y sacrificio. Xavi y Eto'o tuvieron en sus botas el tercero justo antes del descanso, ambos estuvieron faltos de puntería.
Más de lo mismo
La jugada del partido se produjo en los pies de Henry justo en el comienzo de la segunda mitad. Una perfecta combinación entre Iniesta, Eto'o y el jugador francés sirvió para que este último regalara a la grada dos destellos de su calidad (autopase y vaselina) que acabaron significando el tercero para los de Guardiola.
El Barcelona jugaba como quería y por donde quería, a placer. El Wisla se convirtió en un juguete roto en manos del conjunto español, que no mostraba intención ninguna de apiadarse de su rival.
Con el partido y la eliminatoria resuelta Guardiola decidió introducir el primer cambio en las filas de su equipo para dar entrada a Keita en lugar de Pedro, lo que significaba el debut en partido oficial del ex jugador del Sevilla con el conjunto azulgrana. Como hiciese también más tarde con el bielorruso Hleb en lugar de Henry.
Los minutos transcurrían, el Wisla se deshacía poco a poco y el Barcelona se crecía cada vez más adornando sus jugadas con florituras y destellos de la calidad que atesoran sus futbolistas. De este modo llegó el cuarto, de nuevo fue Eto'o el que lograba batir a Pawelek, cerrando la goleada.
El Barcelona sentencia de manera definitiva su clasificación para la fase final de la Liga de Campeones con la goleada conseguida ante el conjunto polaco. Además, deja muy buenassensaciones en cuanto a su juego de cara al inicio de la próxima temporada. El Barça de Guardiola pinta muy bien.
El partido comenzó según el guión previsto, con el Barcelona asediando a un rival atrincherado en defensa y centrado frenar la salida en tromba de los de Guardiola. El Wisla evidenció muy pronto sus inferioridad y no dudó en cortar una vez tras otra el juego blaugrana por medio de faltas. El gol culé parecía cuestión de tiempo, justo el que tardase en cometer un error la defensa polaca, colocada cual muro de hormigón delante de su portería.
Eso ocurrió cuando se llegaba al primer cuarto de hora de partido, pero los dos intentos de Henry se encontraron con Pawelek. Mejor suerte tuvo el indultado Eto'o unos minutos después. El delantero camerunés recibió un perfecto pase en profundidad de Márquez que no desaprovechó cruzando la pelota al palo izquierdo de la portería rival. Tras el gol, Henry estuvo muy cerca de hacer una de las suyas, pero el esférico se fue por centímetros. El Barcelona era un aunténtico vendaval frente a un Wisla que se defendía como gato panza arriba. La goleada estaba servida.
Fue Xavi el que se encargó, con su primera aparición en ataque, de poner en el marcador una diferencia que se antojaba insalvable para el Wisla. Un potentísimo derechazo del centrocampista catalán, ante el que Pawelek no pudo hacer nada, significó el segundo del Barça y la tranquilidad en las gradas del Camp Nou.
El último tramo de la primera mitad siguió siendo un monólogo del Barcelona sobre el césped del Camp Nou ante un equipo al que el partido le venía demasiado grande, pero al que no se le podía exigir más entrega y sacrificio. Xavi y Eto'o tuvieron en sus botas el tercero justo antes del descanso, ambos estuvieron faltos de puntería.
Más de lo mismo
La jugada del partido se produjo en los pies de Henry justo en el comienzo de la segunda mitad. Una perfecta combinación entre Iniesta, Eto'o y el jugador francés sirvió para que este último regalara a la grada dos destellos de su calidad (autopase y vaselina) que acabaron significando el tercero para los de Guardiola.
El Barcelona jugaba como quería y por donde quería, a placer. El Wisla se convirtió en un juguete roto en manos del conjunto español, que no mostraba intención ninguna de apiadarse de su rival.
Con el partido y la eliminatoria resuelta Guardiola decidió introducir el primer cambio en las filas de su equipo para dar entrada a Keita en lugar de Pedro, lo que significaba el debut en partido oficial del ex jugador del Sevilla con el conjunto azulgrana. Como hiciese también más tarde con el bielorruso Hleb en lugar de Henry.
Los minutos transcurrían, el Wisla se deshacía poco a poco y el Barcelona se crecía cada vez más adornando sus jugadas con florituras y destellos de la calidad que atesoran sus futbolistas. De este modo llegó el cuarto, de nuevo fue Eto'o el que lograba batir a Pawelek, cerrando la goleada.
El Barcelona sentencia de manera definitiva su clasificación para la fase final de la Liga de Campeones con la goleada conseguida ante el conjunto polaco. Además, deja muy buenassensaciones en cuanto a su juego de cara al inicio de la próxima temporada. El Barça de Guardiola pinta muy bien.
tomado de www.as.com
1 comentario:
Y querian a Messi para este partido, ratones!
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