La situación a la que habían llegado los dos equipos al partido -el Inter ya clasificado a octavos de la Liga de Campeones y el Werder Bremen con una remota posibilidad de clasificarse a la Copa de la UEFA- hacía que no se pudiera esperar mucho del compromiso.
A medidas que los minutos pasaban, los temores de quienes esperaban ver un partido sin grandes momentos se vieron confirmados. En el campo pasaba poco. El Bremen tenía el balón y trataba de llegar pero sin conseguirlo mientras que el Inter se conformaba con hacer lo mínimo y esperar que el azar le trajese ocasiones.
Al final del primer tiempo, sólo se podían contar dos ocasiones de peligro, una en cada una de las porterías.
La primera fue para el Inter cuando en el minuto 19 el meta alemán Tim Wiese le ganó un mano a mano a mano al brasileño Adriano dentro del área.
El Bremen tuvo que esperar hasta el minuto 42 para rtneer su primera ocasión que se produjo en un saque de esquina que culminó con una cabezazo del peruano Claudio Pizarro que fue bien parado por Julio Cesar.
El segundo tiempo, mejor
En el segundo tiempo, el partido mejoró un poco, gracias a los alemanes. La ocasión de Pizarro pareció ser una especie de reacción para el Bremen que se dio cuente que era posible ganar el partido y abrirse la posibilidad de seguir en Europa.
La presión sobre el área del Inter aumentó y las llegadas se hicieron más contundentes. Pizarro dio dos campanazos con dos disparos en el 49 y en el en el 58 antes de , en el minuto 63, abrir el marcador para el Bremen después de que Julio Cesar parara a medias un disparo de Mesut Özil.
La ventaja del Bremen hacía pensar en que podía venir una reacción del Inter, que hasta el momento había tenido un comportamiento primordialmente pasivo. Pero de una reacción del Inter no hubo noticias.
Lo que hubo fue una continuación de los esfuerzos ofensivos del Bremen con ocasiones para Jurica Vranjes, Pizarro y Aaron Hunt y, en el minuto 81, el segundo gol, marcado por el sueco Markus Rosenberg a centro de Özil, que trajo cierta tranquilidad al equipo alemán.
Sin embargo, en la parte final el Bremen tuvo que volver a sufrir un poco después de que, en el minuto 88, una genialidad aislada de Zlatan Ibrahimovic acortase las distancias.
A medidas que los minutos pasaban, los temores de quienes esperaban ver un partido sin grandes momentos se vieron confirmados. En el campo pasaba poco. El Bremen tenía el balón y trataba de llegar pero sin conseguirlo mientras que el Inter se conformaba con hacer lo mínimo y esperar que el azar le trajese ocasiones.
Al final del primer tiempo, sólo se podían contar dos ocasiones de peligro, una en cada una de las porterías.
La primera fue para el Inter cuando en el minuto 19 el meta alemán Tim Wiese le ganó un mano a mano a mano al brasileño Adriano dentro del área.
El Bremen tuvo que esperar hasta el minuto 42 para rtneer su primera ocasión que se produjo en un saque de esquina que culminó con una cabezazo del peruano Claudio Pizarro que fue bien parado por Julio Cesar.
El segundo tiempo, mejor
En el segundo tiempo, el partido mejoró un poco, gracias a los alemanes. La ocasión de Pizarro pareció ser una especie de reacción para el Bremen que se dio cuente que era posible ganar el partido y abrirse la posibilidad de seguir en Europa.
La presión sobre el área del Inter aumentó y las llegadas se hicieron más contundentes. Pizarro dio dos campanazos con dos disparos en el 49 y en el en el 58 antes de , en el minuto 63, abrir el marcador para el Bremen después de que Julio Cesar parara a medias un disparo de Mesut Özil.
La ventaja del Bremen hacía pensar en que podía venir una reacción del Inter, que hasta el momento había tenido un comportamiento primordialmente pasivo. Pero de una reacción del Inter no hubo noticias.
Lo que hubo fue una continuación de los esfuerzos ofensivos del Bremen con ocasiones para Jurica Vranjes, Pizarro y Aaron Hunt y, en el minuto 81, el segundo gol, marcado por el sueco Markus Rosenberg a centro de Özil, que trajo cierta tranquilidad al equipo alemán.
Sin embargo, en la parte final el Bremen tuvo que volver a sufrir un poco después de que, en el minuto 88, una genialidad aislada de Zlatan Ibrahimovic acortase las distancias.
tomado de www.as.com
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